LANDSTUHL.- Dieciséis soldados estadounidenses heridos en el derribamiento de un helicóptero en Irak llegaron hoy al hospital de Landstuhl, en Alemania, para recibir tratamiento médico, informó hoy un portavoz del centro militar.
Nueve de los soldados fueron internados en la estación de cuidados intensivos. Según el portavoz, el estado de cinco de ellos es "serio". El personal médico pretendía llevar a cabo operaciones hoy mismo, afirmó.
El hospital de Landstuhl, el mayor centro médico de las Fuerzas Armadas estadounidenses fuera de las fronteras del país, está esperando la llegada de más heridos procedentes de Irak, informó el portavoz.
En el más fuerte golpe que han sufrido las fuerzas de ocupación estadounidenses desde el fin de la guerra en Irak, 16 soldados resultaron muertos ayer y otros 20 quedaron heridos cuando el helicóptero en que viajaban fue derribado por guerrilleros con un misil.
El helicóptero Chinook, que fue abatido con un misil tierra-aire, cayó sobre una granja a las 9:00 hora local (3 de la mañana en Chile), cerca del pueblo de Baisa, al sur de Faluja, una población ubicada a 50 kilómetros de Bagdad, y donde prima un sentimiento antiestadounidense.
El Ejército norteamericano precisó que el helicóptero era uno de los CH-47 Chinook que volaban hacia el aeropuerto de Bagdad con personal que regresaba de un viaje de descanso y recreación.
Según dieron a conocer hoy fuentes militares, el helicóptero provenía de una base estadounidense de la ciudad alemana de Giebelstadt. Una portavoz estadounidense en Heidelberg no confirmó sin embargo si la tripulación estaba estacionada también en Alemania.
