LONDRES.- Cerca de 20 videos caseros realizados por la princesa Diana de Gales y que están en posesión de la policía británica, provocaron hoy un escándalo judicial que podría agravar aún más la crisis por la que atraviesa la familia real.
La princesa Diana habría grabado los videos caseros en la década de 1990, en los que se estima hay declaraciones explosivas contra su entonces marido, el príncipe de Gales y su suegra, la reina Isabel II.
Los videos, que Lady Di grabó con la ayuda de su profesor de voz Peter Settelen, están bajo estricta custodia de Scotland Yard, tras haber sido hallados en enero de 2001 en la casa del ex mayordomo real, Paul Burrell.
En principio se creía que eran sólo seis, pero los abogados que representan a Settelen admitieron que la policía de Londres tiene en su poder "cerca de 20 videos".
Settelen, de 52 años, quien ayudó a Diana para poder hablar en público sin tener vergüenza, dijo que los videos son de su propiedad y aclaró que está preparado para llevar en las próximas horas el caso ante la Corte Suprema de justicia.
Sin embargo, la familia de Diana, representada por su hermano, el Conde Spencer, afirmó que les pertenecen a ellos por "cuestiones de herencia".
Para establecer los derechos de copyright, los videos, que en total suman 21 horas de grabación, podrían ser proyectados durante una audiencia en la corte.
En caso que Settelen gane el juicio, se estima que podría hacerse con millones de dólares tras la venta de dichas filmaciones a empresas de televisión estadounidense.
El contenido de los videos fue considerado de tanta trascendencia para la realeza, que durante el caso contra Burrell el pasado año, la corte de Old Bailey determinó que no se proyectaran en público.
"Las negociaciones siguen para establecer la propiedad de un número de objetos de Diana, que en la actualidad están en nuestra posesión", dijo hoy un portavoz de Scotland Yard.