PARIS.- El Presidente francés Jacques Chirac y el jefe del gobierno español José María Aznar se reunirán el jueves en la localidad de Carcassonne (sur) para la cumbre anual entre los dos países.
El 11 de septiembre, Aznar invitó a Chirac en Quintos de Mora, una finca situada al sur de Toledo (centro) para calmar las tensiones que había provocado la guerra en Irak. España siempre estuvo a favor de la ofensiva militar estadounidense-británica en Irak, a la que Francia se opuso tajantamente.
Pese "al carácter amistoso" de este encuentro, persistieron las divergencias, sobre todo con respecto a la futura Constitución europea que está discutiendo la Conferencia Intergubernamental (CIG). España critica el proyecto elaborado por la convención presidida por el francés Valéry Giscard d’Estaing mientras que Francia apoya totalmente este texto.
La portavoz del Elíseo, sede de la presidencia francesa, Catherine Colonna, subrayó que París y Madrid "apoyan la presidencia italiana de la UE en su objetivo de concluir la CIG antes de fin de año".
"Pero quedan sólo algunas semanas para esa fecha y es importante avanzar en las negociaciones", advirtió.
La repartición de los votos entre los Estados miembros constituye la principal cuestión de discordia. En diciembre del 2000 en el tratado de Niza, España obtuvo un peso equivalente al que los cuatro ’grandes’ de la UE (Alemanprevé un sistema de doble mayoría: además del número de países se considerará también el tamaño de la población de los Estados votantes.
"Nosotros, franceses, deseamos ser constructivos y flexibles", declaró Catherine Colonna.
El martes, durante una cumbre germano-española en Berlín, José María Aznar mantuvo sus exigencias y el canciller Gerhard Schroeder reconoció que no se pudieron "salvar las diferencias" entre ambos al respecto del sistema de votación.
El otro gran punto de desacuerdo entre España y Francia es Irak. París considera que los problemas con Madrid pertenecen al pasado y hay que abrirse a la estabilización y democratización de este país en su posguerra. "Más que nunca, la clave es política", se dice en el gobierno francés, donde se considera que la resolución 1511 de la ONU es "un primer paso" pero "hacen falta otros" para mejorar la situación en el terreno.
Según la portavoz francesa, las relaciones bilaterales "alcanzaron un nivel de confianza sin precedentes en la historia" de Francia y España.
"La cooperación en materia de lucha antiterrorista es ejemplar y suministra resultados importantes", aseguró, lo que ilustra el impulso de esta cooperación.