BEIRUT.- El grupo chiíta libanés Hezbolá ha rechazado las condiciones israelíes para un posible intercambio de prisioneros por desavenencias en la lista de nombres propuesta por el Estado judío, informó hoy el periódico Al Mustakbal.
El diario, que cita fuentes cercanas a la negociación, puntualiza que, pese al rechazo, el diálogo no se ha roto, ya que el secretario general de Hezbolá, jeque Hasan Nasrala, ha ofrecido "una última oportunidad" si el mediador alemán así lo solicita.
Al-Mustakbal explica que el propio líder de Hezbolá dijo a los intermediarios que su negativa responde a que Israel "excluye del canje a Samir Kantar", el prisionero libanés que más tiempo lleva encerrado en cárceles judías.
Kantar fue condenado en 1980 a 540 años de prisión tras ser encontrado culpable de la muerte de tres israelíes, abatidos en una operación militar, un año antes, en el norte de Israel.
El Estado judío ha advertido que no liberará a ningún prisionero que tenga "sus manos manchadas con sangre israelí".
En un comunicado publicado hoy, Hezbolá confirmó que Nasrala se entrevistó con el mediador alemán, pero evitó dar más detalles, ya que ambas partes han acordado que "se llevan en secreto para que nada perturbe el resultado final".
La base del posible acuerdo entre Israel y Hezbolá indica que el Estado hebreo debe liberar a unos 20 prisioneros libaneses, y 400 palestinos y de otros países árabes a cambio de la entrega de tres soldados israelíes que podrían estar muertos y de un coronel en la reserva.
Los soldados fueron capturados por combatientes del partido de Dios en octubre de 2000 cerca de las controvertidas granjas de Cheba, un estratégico enclave ocupado por Israel en la frontera entre Líbano y Siria.
El coronel israelí Elhanan Tannenbaum fue capturado un mes más tarde tras una rocambolesca operación que incluía mentiras y negocios de dudosa legalidad.
Sin embargo, el mayor punto de fricción es el destino del aviador israelí Ron Arad, capturado en 1986 tras ser derribado su avión, durante un bombardeo sobre un campo de refugiados palestinos.
Hezbolá se niega a facilitar información sobre Arad, que se cree aún está vivo, y que en Israel ha llegado a convertirse en un auténtico héroe nacional.