CIUDAD DEL VATICANO.- El Papa Juan Pablo II se unió hoy al dolor de los italianos, que hoy celebraron los funerales de los 19 militares asesinados en el atentado de Nasiriya (Irak) y pidió a Dios por los fallecidos e invocó paz para la humanidad, "atormentada por tantos y sangrientos conflictos".
"Me uno espiritualmente a vosotros" y "confío a Dios a los italianos caídos en Irak mientras cumplían su deber al servicio de aquella población", afirmó el Papa en un mensaje enviado a los obispos italianos, hecho público hoy por el Vaticano.
Juan Pablo II ya expresó su dolor y su más "firme condena" por el atentado de Nasiriya nada más producirse, el pasado día 12. El Obispo de Roma calificó el hecho de "vil" y afirmó que no ayuda a la pacificación y recuperación del martirizado Irak.
"He conocido con profundo dolor la noticia del vil atentado de Nasiriya, donde carabineros y soldados italianos han perdido la vida cuando cumplían de forma generosa su misión de paz. Expreso mi más firme condena por este nuevo acto de violencia que, añadido a otros de este tipo realizados en ese martirizado país, no ayuda a la pacificación y recuperación", afirmó el Papa en un telegrama de pésame enviado al presidente italiano, Carlo Azeglio Ciampi.
El pasado domingo, día 16, Juan Pablo II volvió a condenar "cualquier tipo de acción terrorista", en referencia al atentado de Irak y al producido en Turquía, que ha costado la vida a una veintena de personas.
El papa Wojtyla dijo el domingo que el respeto de la vida, la solidaridad internacional y la legalidad deben prevalecer sobre el odio y la violencia.