LONDRES.- Los "actos terroristas espantosos" perpetrados el jueves en la mañana en Estambul presentan "todos los signos" de la red terrorista Al Qaeda, estimó el jueves el ministro británico de Relaciones exteriores Jack Straw, precisando que tres o cuatro empleados del consulado de Gran Bretaña se encontraban desaparecidos.
"Lo que ocurrió en Estambul esta mañana es a todas luces una serie de actos terroristas espantosos", declaró Straw durante una breve declaración a la prensa delante de Downing Street.
"Esto presenta todos los signos del terrorismo internacional practicado por Al Qaeda y de organizaciones asociadas".
El ministro turco del Interior Cemil Cicek confirmó por su parte que las explosiones fueron provocadas por atentados suicidas con coches bombas.
Si bien rechazó dar un balance de la explosión que tuvo como objetivo el consulado de Gran Bretaña, Straw reveló que "tres o cuatro empleados del consulado no respondieron al llamado de sus nombres" después de la explosión.
"Hacemos todos los esfuerzos posibles para saber lo que les ocurrió", agregó.
Straw precisó que el embajador británico en Ankara, Peter Westmascott "se dirigía en estos momentos hacia Estambul a bordo del avión del ministro turco del Interior".
Jack Straw anunció que haría una declaración ante la cámara de los Comunes a las 12:30 locales (y GMT).
Esta serie de atentados "destaca el mensaje central del presidente George Bush, del primer ministro Tony Blair y de todos los otros dirigentes mundiales sobre el hecho que tenemos que enfrentar una amenaza muy seria de terrorismo internacional", comentó Straw.
"Toda la comunidad internacional debe comprender y aceptar sus responsabilidades" en ese terreno, agregó.
El jefe de la diplomacia reconoció que estos últimos acontecimientos serían en el centro de las discusiones que iniciaron Bush y Blair el jueves en las últimas horas de la mañana.
Los dos dirigentes deben ofrecer luego una conferencia de prensa al comenzar la tarde.
Una serie de explosiones se produjero este jueves en la mañana en Estambul, sobre todo en el consulado de Gran Bretaña y en las oficinas del banco británico HSBC, dejando por lo menos trece muertos y 160 heridos según los medios informativos turcos.
Una parte del consulado resultó destruido, según un periodista de la AFP.