TIFLIS.- El nuevo poder de Georgia anunció este lunes que organizará rápidamente una nueva elección presidencial y que su prioridad actual es asegurar la estabilidad del Estado, luego de la renuncia la víspera del Presidente Eduard Chevardnadze, obligado a abandonar la función por una fuerte ola de protesta popular.
La Constitución de Georgia establece que luego de la renuncia del Presidente deben convocarse elecciones en los 45 días siguientes.
"Creo necesario celebrar esta elección tan rápido como sea posible. Tenemos necesidad de estabilidad", dijo la Presidenta interina Nino Burdjanadzé.
La presidenta convocó a varios miembros del gobierno el lunes.
Uno de los líderes de la oposición, Mijail Sakachvili, indicó que según la Constitución, la Presidenta interina no tiene competencia para destituir al gobierno y que ésta no piensa hacerlo. En cambio, es probable que algunos ministros presenten voluntariamente su renuncia, explicó.
Zurab Juania, otro líder opositor con experiencia política, explicó, que de momento, lo esencial era asegurar la estabilidad del poder estatal.
Burdjanadzé, interrogada sobre si ella misma sería candidata a la presidencia de Georgia, declaró: "No es una idea muy buena convertirse en presidente de Georgia. Es un país con problemas muy serios".
Un asunto importante que resta por solucionar es el del nuevo Parlamento que surgió de las elecciones del 2 de noviembre pues la oposición opina que no es legítimo. Una demanda fue depositada para obtener la anulación de los comicios, pero la Corte suprema no indicó en qué fecha la misma será considerada.
