PARIS.- Chile, Gran Bretaña, Australia, Nueva Zelanda y Namibia crearon un grupo ministerial que examinará los recursos disponibles para luchar contra la pesca ilegal en altamar, según un comunicado que publicará mañana lunes la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) en su sede de París.
El grupo, compuesto por el secretario de Estado de Medio Ambiente británico, Elliot Morley, quien fue elegido presidente, y los titulares de Pesca de los otros cuatro países, está abierto a la participación de otros ministros, según el texto.
Su tarea consistirá en proponer, en un plazo de 18 a 24 meses, medidas "políticamente aplicables y financieramente viables" para luchar contra el agotamiento de los recursos haliéuticos y la pesca ilegal.
El grupo fue constituido durante la "mesa redonda del desarrollo sostenido", que se celebra tres veces al año en la sede de la OCDE y cuenta con la participación de ministros, funcionarios, organizaciones internacionales, industriales y organizaciones no gubernamentales (ONG).
El 18 por ciento de las reservas haliéuticas mundiales están "superexplotadas" y el 9 por ciento está "agotado" con la consiguiente desaparición de las especies, recuerda un estudio de la mesa redonda, dirigida por un ex ministro neozelandés de Medio Ambiente, Simon Upton.
No se puede establecer el volumen de pesca ilegal en el mundo porque "las falsas declaraciones de estadísticas de ciertos países podrían esconder una caída todavía más grave de las reservas haliéuticas mundiales", según el estudio de la OCDE.
Lo que resta eficacia a la lucha contra los saqueadores del mar no son las lagunas jurídicas sino el exceso de acuerdos internacionales, explica el documento. Ninguno de estos tratados impide a un Estado conceder un pabellón de conveniencia a un navío extranjero y negarse a controlar las actividades que lleva a cabo en sus aguas.