WASHINGTON.- Jefes religiosos cristianos, musulmanes y judíos de Estados Unidos llamaron el martes al Presidente George W. Bush a comprometerse más activamente en la búsqueda de una solución pacífica al conflicto israelo-palestino.
"La actual pasividad estadounidense corre el riesgo de conducir a una escalada peligrosa del conflicto, sabotear la campaña mundial contra el terrorismo y amenazar los intereses estadounidenses (...) en la región y en el mundo", afirman estos 32 jefes religiosos en un comunicado.
"El Presidente tiene el imperativo moral de actuar con decisión y eficacia para avanzar hacia la paz entre Israel, los palestinos y los Estados árabes", agregan.
Con su Iniciativa Nacional Interreligiosa por la Paz en Medio Oriente, estos líderes religiosos, que dicen representar a 100 millones de creyentes, quieren influir en la campaña de las elecciones presidenciales de noviembre de 2004.
Entre ellos se encuentran dos cardenales católicos, incluido el de Washington, el primado de la Iglesia Ortodoxa griega en Estados Unidos, jefes de las iglesias Luterana, Presbiteriana, Episcopal, Metodista, rabinos y jefes musulmanes.
Afirman que "la ’hoja de ruta’ para la paz en Medio Oriente ofrece la mejor oportunidad en la región y sin el compromiso directo de Estados Unidos, la paz está seriamente en peligro", afirman.