BAGDAD.- El Secretario de Defensa de Estados Unidos, Donald Rumsfeld de visita hoy en Irak, subrayó la necesidad de acelerar el proceso de entrenamiento de una fuerza iraquí de seguridad y defensa.
Rumsfeld inspeccionó hoy una base de la División Aerotransportada 82 y expresó su deseo de que se acelere el proceso de entrenamiento para que los iraquíes releven a las tropas estadounidenses en la garantía de la seguridad del país.
No obstante Rumsfeld fue informado por uno de sus generales de que no se necesita aumentar el número de tropas de EE.UU. en el país.
El secretario de Defensa felicitó a esa División, que tiene su centro de operaciones en Ramadi, en su labor en el adiestramiento de tropas iraquíes en tareas de defensa civil.
Entretanto, en el país se debate en estos momentos la creación de unas milicias de cinco partidos políticos para arremeter contra los insurgentes con más eficacia pero que muchos consideran peligroso.
Rumsfeld se trasladó en un helicóptero "Black Hawk" hasta la base de la División Aerotransportada 82 tras llegar esta madrugada al Aeropuerto Internacional de Bagdad.
La autoridad visitó después la ciudad de Kirkuk, en el norte de Irak, donde los soldados estadounidenses frecuentemente llevan a cabo operaciones en busca de miembros de la resistencia iraquí y del antiguo régimen de Saddam Hussein.
Kirkuk es uno de los principales centros del petróleo en Irak y una ciudad donde el pasado martes las tropas de Estados Unidos lanzaron una amplia operación militar para capturar al vicepresidente del antiguo régimen, Izzat Ibrahim a-Duri.
Por su parte, el general de división, Raymond Odierno, jefe de la Cuarta División de Infantería, responsable de la zona circundante a la ciudad de Tikrit, informó a Rumsfeld de que el aumento en la agresividad de las operaciones del Ejército estadounidense ha tenido éxito para reducir el número de agresiones.
Asimismo, Odierno afirmó que los iraquíes se encuentran ahora más dispuestos a colaborar con sus tropas y proporcionarles información.
Las tropas estadounidenses comenzaron dos operaciones de gran escala a mediados de noviembre para luchar contra la resistencia iraquí en Bagdad y al norte de la capital en el llamado "triángulo suní".
Ordierno afirmó que se ha registrado una mejora gradual en la situación de seguridad en Irak, a pesar de que el pasado mes de noviembre fue el más sangriento para los EE.UU. desde que comenzó la guerra.
En ese sentido, Rumsfeld afirmó ante los medios de comunicación que considera que es demasiado pronto como para hablar de una nueva etapa.
En la capital iraquí las tropas estadounidenses aumentaron visiblemente su presencia y sus helicópteros sobrevolaron la ciudad a baja altura y repetidamente durante varias horas.
Rumsfeld, en su tercera visita a este país desde la caída del régimen de Saddam Hussein, se entrevistó con el gobernador civil de Irak, el estadounidense Paul Bremmer, y con el teniente general Ricardo Sánchez, jefe de las fuerzas de tierra de EE.UU. en Irak.
