WASHINGTON.- El Congreso de Estados Unidos aprobó hoy la primera ley de aplicación nacional para ayudar a los usuarios de Internet a librarse de los "correos basura" que a diario inundan los buzones electrónicos de millones de ciudadanos.
La ley será ratificada por el Presidente George W. Bush, según confirmó la Casa Blanca, que el pasado verano sufrió en su sistema una invasión de correos electrónicos con todo tipo de ofertas de pornografía, medicinas milagrosas o recetas para hacerse rico.
En su votación de hoy, la Cámara de Representantes aprobó por unanimidad la legislación, en la que el Senado introdujo pequeñas modificaciones, sin alterar el espíritu de una ley que había sido defendida por ambos partidos, conocedores de su importancia electoral.
En virtud de esta ley se creará una lista a la que se podrán apuntar todos los ciudadanos que no quieran recibir "spam" (término en inglés para referirse a estos correos).
Además se impondrán multas multimillonarias a quienes hagan ofertas no solicitadas de pornografía, de productos milagrosos para la salud o la imagen física, y de métodos para hacerse millonario en cuestión de horas.
La iniciativa legislativa recibió el apoyo de grupos de defensa de Internet, que consideran que la proliferación de correos basura amenaza con colapsar la red.
La legislación no proscribe por completo las ofertas comerciales a través del correo electrónico, sino que obliga a las empresas a identificarse debidamente y a ofrecer a los consumidores la posibilidad de no volver a ser contactados.
Los correos pornográficos deberán estar claramente etiquetados como tal y los mensajes de texto enviado a los teléfonos celulares estarán prohibidos, a menos que el consumidor los autorice.
Al ser una legislación federal, esta ley invalidará las iniciativas aprobadas previamente en 35 estados, algunas de las cuales, como en el caso de California, prohíben todo contacto no solicitado y da a los consumidores la posibilidad de querellarse directamente contra las empresas que envían "correos basura".
Este último privilegio queda reservado en la nueva ley a los proveedores de correo, como America Online, Microsoft o Yahoo.
Además, los mensajes, establece la ley, deberán proceder de direcciones legítimas y que indiquen su contenido con abreviaturas como adv (para publicidad) para que se puedan filtrar con facilidad.
Según sondeos difundidos recientemente, un 75 por ciento de los estadounidenses está harto del "spam", y uno de cada cuatro considera restringir el uso del correo electrónico.
Pero para algunos críticos la medida no será una panacea. La Comisión Federal de Comercio (FTC) advirtió de que el registro para evitar recibir estos correos no funcionará debido a las dificultades para obligar a los "spammers", muchos de los cuales viven fuera de Estados Unidos, a respetar estas restricciones.
Yahoo asegura que el 40 por ciento de los correos que circulan por su sistema en la actualidad son de estas características.
Otras estimaciones señalan que el correo basura ahora supone ya el 60 por ciento de todo el tráfico por la red y está costando a las empresas unos 10.000 millones de dólares al año.