BERLÍN.- El Canciller alemán, Gerhard Schroeder, habló anoche por teléfono con el Presidente de EE.UU., George W. Bush, sobre la situación de las antiguas deudas de Irak con Alemania, correspondientes al periodo en que gobernó Saddam Hussein, informó hoy el portavoz del Gobierno, Bela Anda.
Irak debe a Alemania un total de 4.000 millones de euros de la época del Gobierno de Hussein.
El enviado especial de Bush, James Baker, tiene previsto viajar a Berlín antes de la pausa navideña para tratar de cómo Alemania puede recuperar o reestructurar la financiación de esos fondos una vez derrocado el régimen.
Schroeder y Bush hablaron también del polémico anuncio estadounidense de vetar la concesión de contratos en Irak a los países que se opusieron a la guerra, que el Gobierno alemán criticó y calificó de ’’inaceptable’’, pero no trascendió el contenido de la conversación.
El Gobierno alemán, a través de su portavoz Bela Anda, ha calificado de ’’inaceptable’’ la exclusión de empresas alemanas de posibles contratos en Irak.
También el presidente de la Confederación de la Industria Alemana (BDI), Michael Rogowski, criticó, en una entrevista con el canal de televisión ’’Deutsche Welle’’, esa decisión estadounidense.