NACIONES UNIDAS.- El representante especial de la ONU para Afganistán, Lajdar Brahimi, dijo hoy que espera que EE.UU. aprenda la lección y "no se vuelvan a repetir situaciones trágicas", como la muerte de quince niños afganos en dos ataques de tropas estadounidenses.
"La protección de los civiles es una obligación que debería ser tomada en cuenta por todos", manifestó Brahimi.
Sus declaraciones se producen tras el anuncio de la muerte de seis niños en un ataque aéreo en la provincia de Paktia, por parte de las fuerzas de la coalición liderada por EE.UU., que se suma a la de otros nueve niños que resultaron muertos también por una ofensiva militar en una zona cercana a finales de la semana pasada.
"Además del terrible sufrimiento de las familias de los niños, este tipo de incidente tiene un efecto que deteriora y desestabiliza la ya precaria situación de inseguridad y de miedo que se vive en el país", indicó.
Agregó que desafortunadamente "este tipo de acontecimientos hace que sea más fácil para que aquellos que quieren arruinar el proceso de paz encuentren seguidores que apoyen su causa".
Por su parte, el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) señaló que "la muerte de un sólo niño ya son demasiadas muertes".
Esta agencia de la ONU hizo un llamado a aquellos que están involucrados en actividades militares en Afganistán a mantener la "máxima precaución en su operaciones", para asegurar que las comunidades locales no pierdan su fe en el proceso de reconstrucción del país.