WASHINGTON.- El secretario de Defensa de Estados Unidos, Donald Rumsfeld, informó que el capturado ex Presidente de Irak, Saddam Hussein, contará con la protección reservada a los prisioneros de guerra durante los interrogatorios a que es sometido.
Los servicios secretos de EE.UU. quieren obtener de Hussein información sobre los insurgentes iraquíes que a diario atacan a las tropas norteamericanas en Irak, así como otros detalles del derrocado gobierno de Bagdad, especialmente sobre las armas de destrucción masiva que supuestamente poseía.
Rumsfeld dijo que Hussein será tratado "de una forma humana y profesional", durante una comparecencia en el programa "60 Minutes", de la cadena de televisión CBS.
Añadió que todavía es muy pronto como para anunciar si el prisionero, capturado el pasado sábado en un escondite subterráneo cercano a Tikrit, su localidad natal, adoptará una línea dura o si cooperará con quienes lo interrogan en un lugar que no identificó.
Rumsfeld describió a Hussein como alguien que proyectaba la imagen de ser muy duro, pero que fue capturado como un cobarde escondido en un hoyo.
El secretario de Defensa estadounidense había dicho poco antes el domingo que la captura de Hussein es un suceso "trascendental" para el pueblo de Irak que, gracias a las tropas de EE.UU. y de la coalición, afronta "un futuro de libertad y no de terror".
Rumsfeld fue el primero en recibir la noticia desde Bagdad y en informar de ella al Presidente de EE.UU., George W. Bush.
En un comunicado, Rumsfeld se sumó a las celebraciones por la captura de Hussein, cuya obsesión por la higiene era ampliamente conocida y ahora las imágenes de la televisión lo mostraban con el pelo largo, desaliñado y con una crecida barba.
Rumsfeld elogió a los soldados estadounidenses y de la coalición y a miembros de las fuerzas de seguridad iraquíes que "dieron sus vidas para hacer posible este momento", al tiempo que encomió la labor de inteligencia que permitió la captura de Hussein en la operación "Amanecer Rojo".