SANTIAGO.- El helicóptero en que viajaban dos exploradores británicos, quienes intentaban romper el récord mundial de vuelo entre los dos Polos, se desplomó hoy en la Antártica, a 193 kilómetros al norte de la base Patriot Hills, pero sus tripulantes sobrevivieron al accidente.
Jenny Murray, una abuela de 63 años con el récord mundial por volar sola por el mundo, se quebró un brazo en el accidente, mientras que su copiloto, Colin Bodill, de 53, se lesionó el pecho y su condición seguía estable.
"Ambos están heridos, pero de buen ánimo y al cuidado de un médico", dijo a Reuters por teléfono un portavoz del equipo de apoyo.
Ambos pilotos fueron rescatados por un equipo enviado desde Patriot Hills y regresaron la base a la espera de un avión que los llevara a un hospital en Punta Arenas, Chile, donde recibirían tratamiento.
El accidente ocurrió apenas cuatro días después de su llegada al Polo Sur, tras haber recorrido un tercio de su previsto maratón aéreo de 32.000 millas náuticas.
Murray, quien el lunes visitó brevemente a su esposo Simon, también de 63 años, quien camina hacia el Polo Sur con su compatriota Pen Hadow, salió con Bodil de Nueva York el 20 de octubre.
Desde entonces ambos habían volado por la costa este de Estados Unidos, atravesando el Caribe y el centro de Brasil y bajando por la costa este de Argentina hacia el frío sur.
El dúo llegó al Polo Sur en el centenario del primer vuelo con motor de los hermanos Wright.
La próxima etapa del vuelo de los británicos los habría llevado 16.000 millas náuticas arriba de la costa occidental de Chile, sobre Perú, Centroamérica y la costa oeste de Estados Unidos y Canadá, y luego sobre Alaska hasta el Artico y el Polo Norte, adonde tenían previsto llegar el 8 de abril.
Murray y Bodil habían planeado terminar el viaje el 15 de abril tras volar de vuelta a Nueva York.
El principal objetivo del vuelo en un helicóptero Bell 407 era establecer un récord mundial, e ir generando conciencia sobre asuntos ambientales durante el recorrido.
Murray estableció en el 2000 el récord mundial de vuelo más rápido realizado por una mujer en solitario alrededor del mundo, al cubrir la distancia en sólo 99 días.