WASHINGTON.- Lee Boyd Malvo, uno de los dos hombres declarados culpables por el caso de los francotiradores de Washington, fue condenado hoy a doble prisión perpetua sin posibilidad de indulto, tras ser acusado por diez asesinatos que tuvieron lugar en octubre del año pasado en los alrededores de Washington.
A diferencia de Malvo -quien tenía 17 años en el momento de los hechos-, Muhammad fue sentenciado el 24 de noviembre pasado en Virginia Beach, Estado norteamericano de Virginia, a la pena de muerte por uno de los asesinatos.
En el juicio a Malvo, realizado en Chesapeake (Viriginia), la defensa no negó que su cliente participara en los ataques, pero argumentó que era inocente en el sentido jurídico, alegando que Muhammad lo había sometido a un "lavado de cerebro" y que por lo tanto no había estado en condiciones de distinguir entre el bien y el mal.
Durante el proceso judicial, los representantes de Malvo llamaron a varios psicólogos al estrado para apoyar el argumento del "lavado de cerebro".
La acusación, por su parte, presentó a psicólogos que admitieron una fuerte influencia de Muhammad -a quien el joven consideraba un padre-, pero que señalaron que Malvo tenía plena consciencia de sus actos.
Finalmente, el 18 de diciembre pasado, Malvo fue declarado culpable y hoy se dio a conocer la sentencia. En realidad hubo 13 ataques, pero tres víctimas lograron sobrevivir.