WASHINGTON.- Las patrullas aéreas estadounidenses permanecían en estado de máxima alerta el viernes y las autoridades investigaban si supuestos terroristas lograron evitar los sistemas de detección de Los Ángeles.
"Seguimos estando en un nivel alto de alerta", dijo el mayor de la Fuerza Aérea Eric Butterbaugh, portavoz del comando de defensa aeroespacial norteamericano en Colorado Springs, estado de Colorado.
Las preocupaciones en Estados Unidos se centraban en los pasajeros registrados en los vuelos cancelados de Air France, cuyos nombres coincidían con los de personas incluidas en una lista de alerta de terrorismo, pero que no se presentaron, dijeron las autoridades.
Entre ellos estaba un pasajero tunecino que se dijo tenía licencia de piloto y se sospechaba de tener lazos con Al Qaeda, la red a la que se le culpa de los ataques del 11 de septiembre del 2001.
Según la agencia francesa de noticias, una fuente de la policía antiterrorista de Francia dijo que el tunecino había sido el centro de una alerta de inteligencia estadounidense, pero el hombre estaba todavía en Túnez, no en Francia, y era desconocido para la policía francesa.
Las autoridades francesas detuvieron a varias personas que tenían reservaciones en los vuelos cancelados el miércoles y el jueves después de que las autoridades estadounidenses transmitieron lo que llamaron informes de inteligencia "creíbles y confiables" de una amenaza.
Nueve personas en la lista de pasajeros del vuelo AF068 de Air France del 24 de diciembre fueron interrogadas y dejadas en libertad, después de que las autoridades francesas dijeron que no encontraron pruebas de vínculos terroristas.
Air France reanudó el servicio a Los Angeles el viernes, aunque el vuelo inicial, AF068, fue retrasado durante casi tres horas por revisiones de seguridad, dijo una portavoz de la aerolínea.
Un funcionario estadounidense de alto rango dijo que era demasiado pronto para decir si una conspiración terrorista había sido abortada.
"Todavía se está investigando esta situación", dijo el funcionario bajo la condición de no ser identificado.
Una portavoz de la embajada francesa en Washington no quiso comentar sobre un artículo del Wall Street Journal, de que el rápido anuncio de Francia de que los vuelos habían sido cancelados, podría haber alertado a los terroristas, que escaparon.
"Colaboramos sobre una base diaria con nuestros similares estadounidenses en la lucha contra el terrorismo. Esta vez se hizo más público, porque hubo cancelaciones de vuelos", dijo la portavoz, Natalie Loiseau.
Al preguntársele sobre la respuesta de Francia a la cancelación de vuelos, el portavoz de la Casa Blanca Scott McClellan dijo: "Agradecemos la ayuda suministrada por nuestros socios internacionales".
Estados Unidos se ha mantenido en estado de alerta por posibles ataques desde el domingo, después de lo que la inteligencia estadounidense describió como un incremento en las comunicaciones interceptadas sobre un posible ataque durante o después de las festividades navideñas.