MADRID.— Un asesino en serie conocido por dejar un naipe cerca de los cadáveres de sus víctimas fue condenado hoy a 142 años de prisión.
Alfredo Galán, ex soldado de 27 años que sirvió en las fuerzas de paz en los Balcanes, fue encontrado culpable de matar a tiros a seis personas desde enero a marzo del 2003.
Los medios de comunicación españoles lo calificaron como "el asesino de la baraja", por dejar naipes junto a los cadáveres de cuatro de sus víctimas.
A pesar de su sentencia a 142 años, bajo las leyes españolas, una persona no puede pasar más de 20 años en prisión por delitos no relacionados con el terrorismo. En caso de que sean tipificados de tal forma, el límite es de 40 años.
