BERLÍN.- El Tribunal Federal Supremo de Alemania inició hoy la revisión del proceso contra Armin Meiwes, condenado en enero del pasado año a ocho años y medio de cárcel por homicidio tras confesar que mató y se comió partes del cadáver de un individuo que al parecer quería ser objeto de sus fantasías caníbales.
El alto tribunal, con sede en Karlsruhe (suroeste), deberá responder a la petición de cadena perpetua formulada hoy por la Fiscalía Federal.
El fiscal federal Lothar Senge expresó hoy su convicción de que el crimen no fue un homicidio, sino un asesinato por motivos bajos, pues "despojó a la víctima de su dignidad y lo hizo sin escrúpulos, por impulso de su propia pasión sexual".
Para Senge, el crimen no deja de ser un asesinato por motivos bajos por la circunstancia de que la víctima supuestamente accediera a dejarse matar y devorar debido a su masoquismo sexual.
La Audiencia Provincial de Kassel consideró en su sentencia, dictada el 30 de enero de 2004, que el caníbal no asesinó, sino que sólo mató, porque la víctima consintió a ello.
Senge opinó hoy que el caníbal no sólo asesinó, sino que lo hizo para cometer a continuación otro delito, como es en Alemania la "perturbación del descanso de los muertos".
Por todo ello, pedirá al Supremo que condene a Meiwes a cadena perpetua y que, además, constate una "culpa grave" en el crimen, lo que impediría al caníbal salir de la cárcel transcurridos 15 años, tiempo máximo de permanencia en prisión en Alemania a no ser que la sentencia especifique lo contrario.
Meiwes tiene ahora 43 años, y su abogado, Harald Ermel, no ve motivos para endurecer la condena de los jueces de Kassel, pues considera que el argumento de que el caníbal despojó de su dignidad a la víctima no es válido porque "la víctima renunció a esa dignidad".
El crimen se cometió en marzo de 2001, cuando la víctima viajó de Berlín a la pequeña localidad de Roteburgo del Fulda para dejarse matar y comer por parte del caníbal, al que había conocido en internet y que filmó los hechos.
"Esas fantasías cruzan la vida del acusado como un hilo rojo", afirmó hoy el citado fiscal.
