BAGDAD.- Un ataque con bombas realizado por rebeldes destruyó un minibús de la policía de Irak en un retén en el poblado natal del ex dictador Saddam Hussein el viernes, causándole la muerte al menos a siete policías, dijeron las autoridades.
Dos policías dijeron que la bomba estaba plantada en el vehículo y fue activada conforme se acercaba al retén en Tikrit, 130 kilómetros al norte de Bagdad. Sin embargo, un oficial de la Guardia Nacional de Irak dijo que la detonación fue causada por un automóvil bomba conducido por un suicida, el cual se puso junto al minibús en el retén.
La explosión forma parte de la serie de acciones rebeldes en contra de las fuerzas de seguridad que trabajan junto con soldados de la coalición encabezada por Estados Unidos para combatir a los rebeldes. Dos atacantes suicidas, con explosivos en sus cuerpos, atacaron esta semana dos centros de reclutamiento para las fuerzas de seguridad iraquíes, causándole la muerte a un total de 73 personas.
La explosión en Tikrit ocurrió alrededor de las 8.30 del viernes, día dedicado a la oración por la mayor parte de los musulmanes.
El teniente coronel Sad Abdul Hamid y el mayor de policía Jakim al-Azaui, quien trabaja en el hospital a donde fueron llevados los heridos, dijeron ambos que la bomba fue escondida en el minibús y activada mientras era conducido al principal retén de la entrada oriental a Tikrit, causándole la muerte a al menos siete policías y heridas a otros ocho.
Pero el mayor Salman Abdul Uajid, de la Guardia Nacional en Tikrit, dijo que el minibús fue destruido por la explosión de un automóvil bomba conducido por un atacante suicida. Indicó que nueve policías estaban a bordo del vehículo y que siete de ellos murieron, con dos más heridos. Uajid expresó que seis personas resultaron lesionadas, dos de ellas miembros de la guardia y el resto civiles.
