CIUDAD DEL VATICANO.- A diferencia de su predecesor, el Papa Benedicto XVI escribe sus propios discursos, dicen sus allegados.
Con la redacción personal de sus homilías, el cardenal Joseph Ratzinger, que fue profesor de teología en universidades alemanas y estuvo vinculado con el Vaticano durante décadas, contrasta fuertemente con el sistema concertado por su predecesor, Juan Pablo II, para facilitar la redacción de sus discursos.
Juan Pablo II pronunciaba tantas homilías que necesitaba un sistema capaz de producir discursos en serie: con frecuencia hablaba en público varias veces al día, ante feligreses muy dispares.
El Vaticano "tuvo que crear una oficina para escribirlos" que empleó a diplomáticos y a otros funcionarios de la Santa Sede, así como a un grupo de asesores, dijo el ex diplomático vaticano John-Peter Pham.
"Juan Pablo escribió muy pocos de sus discursos" aunque ocasionalmente "cambió una frase aquí o allá", dijo Pham.
Redactor
El difunto Pontífice escogió para redactor de sus discursos a un arzobispo italiano, monseñor Paolo Sardi, dijo Pham. El arzobispo declinó ser entrevistado acerca del sistema de discursos del Vaticano, pero otro funcionario de la Secretaría de Estado, que declinó ser identificado, dijo que el nuevo Papa ha asumido personalmente la redacción de sus homilías.
Benedicto "las escribe él mismo, al menos por el momento", dijo el funcionario. "Veremos si continúa haciéndolo" a medida que aumentan las presentaciones y los viajes del Pontífice.
El nuevo Papa escribió su primer discurso completo como sucesor de San Pedro, una larga homilía en latín que fue pronunciada ante el colegio cardenalicio el 20 de abril en la capilla sixtina, donde había sido elegido menos de 24 horas antes.
"Son muy pocas las personas que pudieran escribir ese discurso en latín", dijo Pham.
En sus días de profesor de teología en Alemania, Ratzinger se destacó por sus discursos y sus clases. Uno de sus alumnos de entonces, el padre Vincent Twomey, dijo que las clases de Ratzinger se caracterizaban por "su claridad, su progresión lógica y la calidad de sus expresiones".
El padre Twomey dijo que no le sorprendía que Benedicto escribiese sus discursos.
"Es un pensador original", dijo. "No depende de lo que piensen los demás".
