MIAMI.- En una de las mayores tragedias de inmigrantes cubanos de la última década, 31 personas permanecían anoche desaparecidas en alta mar en medio de una intensa búsqueda del Servicio Guardacostas.
La noticia conmovió el sur de la Florida, aunque las autoridades estadounidenses no habían recibido hasta la medianoche ninguna pista proveniente de familiares, como es habitual en estos casos.
"Hemos estado todo el día a la expectativa de alguna información de parientes en Miami que pudiera ayudar en nuestra búsqueda e investigación", declaró Luis Díaz, portavoz del Servicio Guardacostas.
Según un reporte, la lancha -de 28 pies de eslora- zozobró a unas 30 millas de las costas cubanas, apenas 30 minutos después de haber salido del norte de la provincia de Matanzas. Las evidencias apuntan a que el fatídico viaje estuvo organizado por contrabandistas residentes en el condado Miami-Dade.
Los tres sobrevivientes, un hombre y dos mujeres, fueron rescatados por el barco mercante Melfi Habana -con bandera de Antigua y Barbuda- y se encuentran actualmente hospitalizados en Cuba en estado grave. El trío fue víctima de la deshidratación y de quemaduras de segundo grado.
El gobierno cubano no ha informado oficialmente sus nombres, ni la prensa oficial de la isla había hecho ninguna mención al incidente.
"Este ha sido un verano cargado de tragedias", comentó Díaz. "Esto tiene que parar... las familias no estiman verdaderamente a sus parientes cuando los ponen en manos de contrabandistas".
En la historia de dramáticos naufragios de cubanos en el estrecho de la Florida, la mayor catástrofe de los últimos diez años se remonta a noviembre del 2001, cuando una embarcación que salió desde Pinar del Río zozobró con 30 pasajeros, según consignó El Nuevo Herald.
