WASHINGTON.- El vicepresidente de Estados Unidos, Dick Cheney, designó a John Hannah como asesor para la seguridad nacional, y a David Addington como jefe de su gabinete, ambos cargos que ocupaba Lewis Libby, quien renunció tras ser acusado por un fiscal en el llamado "Cia-Gate".
Hannah fue hasta ahora el vice de Libby en el área de seguridad nacional, además de uno de los cinco colaboradores de Cheney interrogados por el juez del caso sobre la revelación de la identidad de una agente de la CIA, Patrick Fitzgerald.
El ex embajador Joseph Wilson, el marido de la agente Valerie Plame, señaló a Hannah como probable fuente del escándalo que salpica a la Casa Blanca.
Hannah integró el grupo de funcionarios que en agosto de 2002 trabajaron bajo órdenes de Cheney para convencer a la opinión pública y al Congreso de la supuesta amenaza de Irak.
En tanto, el fiscal Fitzgerald podría encarcelar a Libby para obligar a Cheney a presentarse a declarar, según versiones que circulan entre los abogados involucrados en el caso.
Sin embargo, Cheney puede apelar al privilegio que exime a los miembros del gobierno a declarar en temas protegidos por el secreto de estado y eludir asi su presentación a la justicia.
El juez republicano Reggie Walton fijó hoy la fecha de la primera audiencia para la lectura de las acusaciones contra Libby, entre ellas por obstrucción a la justicia y falso testimonio.
El temor de la Casa Blanca es que el ex colaborador de Cheney, que hasta hora se declaró inocente de los cargos, rompa el silencio y declare la información que posee sobre el caso.
