BERLÍN.- Alemania no teme que a causa de la suspensión del suministro de gas ruso a Ucrania se produzca una situación de desabastecimiento en este país, según expresó hoy en Berlín una fuente gubernamental alemana.
Esta evaluación, expresada ya la semana pasada, no ha experimentado ningún cambio, dijo en la capital alemana un portavoz del Ministerio de Economía.
Indicó que hay suficiente capacidad de almacenamiento y gas almacenado y además existe la posibilidad de importar gas de otros países.
Por otra parte, Aribert Peters, presidente de la Confederación Alemana de Consumidores de Gas, dijo en una entrevista con la radio RBB de Berlín que los consumidores alemanes no corren peligro de quedarse sin gas.
Actualmente, las reservas almacenadas alcanzan para 75 días y además Alemania puede no sólo puede importar gas de Rusia, sino también de Noruega y Holanda, entre otros.
Peters señaló que especialmente los consumidores privados tienen una cierta garantía de que no se les suspenderá el suministro de gas, porque pagan prácticamente el doble de lo que pagan otras instituciones y tienen contratos especiales en los que existe una cláusula de interrupción de la entrega del energético.
"Si la situación se pone crítica, los consumidores privados serán los últimos a los que se les cortará el gas", indicó.
Sin embargo, Peters señaló que la suspensión de la entrega de gas ruso a Ucrania es una especie de advertencia de que el gas no es algo inacabable y exige una reorientación en materia de política energética.
"Lamentablemente hemos tenido que comprobar que en los últimos diez a veinte años ha crecido la dependencia de Alemania de las importaciones de energéticas. Este no es el camino adecuado", recalcó.