JERUSALEN.- La intervención quirúrgica del primer ministro israelí, Ariel Sharon, que ha sufrido un infarto cerebral grave "transcurre bien", anunció a los periodistas su portavoz, Raanan Gissin, sin más precisiones.
"La operación transcurre bien y su situación está estabilizada", aseguró el portavoz tras más de hora y media de intervención, que proseguía cuando eran las tres de la madrugada (01h00 GMT).
"Por supuesto que estoy preocupado, pero espero que Sharon gane esta batalla, como ha ganado las batallas anteriores" añadió.
Sufrió un "grave infarto cerebral y está con respiración asistida", declaró con anterioridad el profesor Shlomo Mor Yossef, director del hospital Hadassah Ein Karem de Jerusalén, donde se encuentra ingresado Sharon.
Según el director, Sharon, de 77 años, sufre una grave hemorragia cerebral.
Shmuel Shapira, médico del hospital, agregó que Sharon fue "conducido a una sala de operaciones para drenarle la sangre" del cerebro.
La intervención, realizada por dos neirocirujanos, debía durar varias horas.
Unos médicos indicaron que la operación podía poner potencialmente en peligro la vida del Primer Ministro y que en caso de sobrevivir permanecería inmovilizado un tiempo.
"Es muy arriesgado y podría morir a resultas de la operación (...) Si es tan importante como dicen, podría ser muy malo", declaró a la televisión informativa norteamericana CNN el neurólogo estadounidense Matthews Gwynn.
"Si sobrevive a la operación, pasará varios días en coma", agregó.