LONDRES.- Siguiendo los pasos del príncipe Harry, su hermano menor, el príncipe Guillermo de Inglaterra comenzó ayer su carrera militar, al entrar en la Academia Militar Real en Sandhurst.
El segundo heredero en línea al trono británico, llegó hasta la instalación en Camberley, al sur de Inglaterra acompañado de su padre, el también heredero al trono, el príncipe Carlos, quien lucía un poco aprensivo en el primer día del curso de entrenamiento de un año que tendrá su hijo mayor, Guillermo.
En octubre, el joven de 23 años aprobó los exámenes de la junta de comisiones regulares -una serie de pruebas y tareas para medir la habilidad de los candidatos para satisfacer las demandas físicas, mentales y emocionales que enfrentan los funcionarios militares- para ingresar en esta academia.
"Estoy absolutamente encantado de haber superado el primer obstáculo, pero estoy muy consciente, después de hablar tanto con mi hermano Harry, de que este es sólo el comienzo", dijo Guillermo en el momento en que supo que había aprobado las primeras etapas de la postulación.
"Realmente estoy ansioso por ocupar mi lugar junto a los otros cadetes en Sandhurst", agregó en esa ocasión.
Grandes aspiraciones
El hijo mayor de la fallecida princesa Diana de Gales tiene la meta de convertirse, eventualmente, en el Comandante en Jefe de las Fuerzas Armadas de Gran Bretaña, rol que tradicionalmente es ocupado por el monarca.
El comandante de la academia, el General Andrew Ritchie, previno en tono de chiste a William de los duros tiempos que le esperan.
"(Los príncipes) Están acostumbrados a trabajar cuatro horas diarias y dormir 20, y nosotros revertimos eso", dijo a la BBC.
Por su parte, el hermano menor de Guillermo, Harry, de 21 años, quien entró en Sandhurst el año pasado y que por lo tanto estará en un nivel superior, bromeó diciendo que tiene deseos de ver que su hermano mayor lo tenga que saludar con los honores militares correspondientes.