JERUSALÉN.- El Tribunal Supremo israelí autorizó hoy la construcción de un muro de separación en torno a la ciudad-asentamiento israelí de Modiín, a pesar de las demandas presentadas por israelíes y palestinos.
Tras rechazar las solicitudes interpuestas por residentes de la municipalidad de Maccabin-Reut, y de las aldeas palestinas de Beir Sirah y Shuqba, el Alto Tribunal levantó los mandatos temporales presentados contra la construcción de la barrera en esa zona.
Desde que los interesados presentaron sus peticiones, el trazado original del muro fue modificado de modo que la cerca ha sido desplazada al oeste, a unos 75 metros de la "Línea Verde", el trazado imaginario que separa Cisjordania del territorio reconocido internacionalmente como Israel.
Parte del recorrido de la barrera penetraría en el territorio israelí, al sur de la localidad de Maccabim.
El estado israelí ha ofrecido a los residentes de la aldea palestina de Beit Sirah 1,3 hectáreas de terreno a cambio de parte de sus tierras, que quedarán cercadas al este del muro de separación.
Por su parte, los vecinos de las localidades israelíes de Maacabm-Reut interpusieron su demanda porque alegaron que el trazado del muro se encontraba demasiado próximo a sus hogares.
"Hemos resuelto según las actuales circunstancias, las decisiones militares han sido tomadas en los límites de lo razonable", declararon en la sentencia los jueces del Supremo, Aharón Barak, Dorit Beinish y Ayalá Procaccia.