LA PAZ.- El Presidente de Bolivia, Evo Morales, decretó el estado de emergencia nacional para hacer frente a la compleja situación que se vive en seis de los nueve departamentos del país azotados por las intensas lluvias de los últimos días, que dejaron al menos 3.600 familias damnificadas.
El decreto, aprobado por el Gobierno durante la reunión del gabinete de ministros, permitirá el desembolso adicional de recursos y gestionar la cooperación internacional.
"Al declarar el estado de emergencia nacional se activa la posibilidad de acceder a la ayuda internacional y se permite que las ONGs como la Cruz Roja participen activamente", explicó a la prensa el ministro de Defensa, Walker San Miguel.
Morales tenía previsto desplazarse a la población de San Borja, en la región de Beni (oriente), pero debió suspender su viaje debido al mal tiempo.
Las zonas más afectadas
La situación más crítica se registra en San Borja, donde unas 894 familias se vieron afectadas por el desbordamiento de los ríos y debieron ser ubicadas en albergues temporales.
De momento, se ha reportado la muerte de un joven en los poblados aledaños al municipio de Cuatro Cañadas, en el departamento de Santa Cruz.
En la región de La Paz, cuya capital homónima es la sede del gobierno, la administración local declaró emergencia roja, pues en 12 de sus 20 provincias se reportaron problemas vinculados con las intensas precipitaciones.
Las autoridades locales de Paz y la vecina ciudad de El Alto declararon emergencia amarilla.
El Ejecutivo designó al nuevo viceministro de Defensa Civil, Gil Tuco Ayma, quien promoverá reuniones con delegados de ONGs, la Cruz Roja, organismos internacionales y países amigos, para gestionar la cooperación extranjera.
Fuentes del Servicio Nacional de Meteorología e Hidrología informaron que las lluvias se mantendrán hasta fines de marzo.
