LONDRES.- Todas las partes implicadas en el proceso electoral haitiano deben respetar y promover "el imperio de la ley" para que los comicios presidenciales y legislativos del próximo 7 de febrero conduzcan a un fin de la violencia y la inestabilidad en el país, subrayó hoy Amnistía Internacional (AI).
Estas elecciones, que fueron convocadas y aplazadas cuatro veces el año pasado, son las primeras que se celebran desde que en febrero de 2004 una revuelta popular sacó del poder y del país al entonces presidente, Jean Bertrand Aristide, actualmente exiliado en Sudáfrica.
En un comunicado difundido desde su sede en Londres, la organización no gubernamental consideró que "los próximos comicios pueden traer consigo una nueva etapa para Haití o hundir al país en una mayor pobreza y una situación de violencia aún más grave".
"Está en las manos de todos los implicados en las elecciones hacer los progresos necesarios para conseguir un futuro donde el respeto a los derechos humanos sea una realidad", consideró la directora del Programa para América de AI, Susan Lee.
AI abogó, asimismo, porque "la seguridad y el respeto a los derechos humanos de todos los haitianos sea la prioridad del nuevo Gobierno" que salga de las urnas.
"Esto no será posible a menos que las autoridades haitianas y la Misión de Naciones Unidas para la Estabilización de Haití (MINUSTAH) puedan asegurar que los candidatos y los electores pueden participar en las elecciones sin temer por su seguridad", añadió Lee.
En un reciente informe, Amnistía y la organización humanitaria Oxfam denunciaron que la violencia armada continúa segando vidas entre los habitantes de Puerto Príncipe pese a la presencia de la MINUSTAH (la misión de paz de la ONU) en el país caribeño.