DAMASCO.- Personalidades de la oposición siria rechazaron hoy la ayuda financiera ofrecida por EE.UU. para acelerar las reformas en Siria y el régimen de Damasco calificó la oferta de "grosera injerencia" en los asuntos del país.
La respuesta siria tiene lugar dos días después de que el departamento de Estado norteamericano anunciase una ayuda de cinco millones de dólares a los grupos que promueven reformas democráticas en ese país.
"Nadie necesita dinero de Washington o de otro país pues los problemas de la oposición siria no son financieros sino políticos. El futuro del proceso político sirio depende principalmente de agendas y programas correctos y no de financiación", dijo el intelectual sirio Michael Kilo.
Kilo, que escribe duros artículos de prensa contra el régimen sirio, agregó que las "políticas norteamericanas en la región, especialmente las que se refieren a los palestinos, no permitirán a nadie pensar en obtener respaldo financiero de Estados Unidos".
El diputado sirio Husein Nimr, dijo, por su parte, que "esa ayuda es una grosera y descortés interferencia en los asuntos internos de un país".
"Las últimas actitudes estadounidenses contra Siria reflejan el fracaso de Washington en Irak, y un desprecio a la legislación internacional", opinó.
La intromisión de Estados Unidos en los países árabes
Washington ha intensificado sus presiones sobre el régimen del Presidente sirio, Bachar al Asad, con la excusa de que interfiere en los asuntos de los vecinos Irak y Líbano.
Además, acusa a Damasco de no colaborar con la comisión de la ONU que investiga el asesinato del ex Primer Ministro libanés Rafic Hariri.
La mayor parte de los países árabes han insistido en que cualquier cambio o reformas en sus gobiernos debe hacerse desde dentro, ya que una interferencia desde el extranjero será vista como un intento de EE.UU. por imponer la democracia.