LONDRES.- Un soldado de las SAS, las tropas especiales británicas, renunció al ejército luego de tres meses en Irak por haberse negado a combatir junto a los estadounidenses, a los que acusó de utilizar "tácticas ilegales", informaron fuentes locales.
El soldado británico, Ben Griffin, de 28 años, dijo al "Sunday Telegraph" que asistió a "docenas de actos ilegales" cometidos por los militares estadounidenses, que consideran a los iraquíes "subhumanos".
"He visto en Bagdad tantas cosas ilegales y equivocadas. No es conduciendo operaciones en este modo que se conquista el corazón y la mente de la población local. Y sin el apoyo de la gente, no se ganan las guerras", agregó Griffin.