MOSCU.- El servicio ruso de Inteligencia Exterior negó el sábado que Moscú haya proporcionado a Bagdad información sobre el movimiento de las fuerzas estadounidenses y los planes de Washington durante la invasión a Irak en el 2003.
"Acusaciones similares, carentes de fundamentos, sobre la inteligencia rusa, han sido hechas más de una vez", dijo el portavoz del servicio, Boris Labusov, de acuerdo con un funcionario de su departamento. "No consideramos necesario emitir comentarios sobre semejantes invenciones".
Un reporte del gobierno, revelado el viernes, mencionó que dos documentos iraquíes decomisados señalaban que los rusos recolectaron información de fuentes "dentro del Mando Central Estadounidense", y que los datos de inteligencia en el campo de batalla fueron entregados al entonces líder iraquí, Saddam Hussein, mediante el embajador ruso en Bagdad.
El informe señaló también que el gobierno ruso tenía fuentes dentro del mando estadounidense, cuando éste planeó y ejecutó la invasión de Irak, en el 2003.
Pavel Felgenhauer, un analista militar independiente en Moscú, dijo el viernes que la información contenida en el reporte entraría en el margen de lo posible.
"Es bastante verosímil", dijo el analista a The Associated Press.