WASHINGTON.- El charango adornado con hojas de coca que el Presidente de Bolivia, Evo Morales, le regaló a la secretaria de Estado norteamericana, Condoleezza Rice, a principios de mes en Santiago, no fue llevado a Estados Unidos y quedó en algún lugar en el camino que la Cancillería de Washington no pudo identificar.
Rice "no trajo la guitarra de vuelta con ella" a Estados Unidos, dijo una funcionaria de prensa del Departamento de Estado en referencia al pequeño instrumento de cuerda tradicional de la región andina.
"No sabemos dónde está", agregó la funcionaria cuando se le preguntó si conocía el paradero del charango, y luego deslizó que el Departamento de Estado no iba a entrar en más detalles sobre el episodio.
El instrumento musical fue entregado por Morales a Rice como presente durante la reunión que ambos mantuvieron en Santiago al margen de las celebraciones por la asunción de la nueva Presidenta de Chile, Michelle Bachelet, el 11 de marzo último.
Conflicto cocalero
El regalo causó una relativa sensación entre la prensa estadounidense que acompañaba a la ministro de Exterior del Presidente George W. Bush. Por ejemplo, un corresponsal del Chicago Tribune que cubrió la reunión y la entrega del charango artesanal con hojas de coca incrustadas afirmó que el regalo de Morales parecía "llevar atado un mensaje".
El cultivo de hojas de coca es uno de los puntos ásperos en la nueva relación entre Estados Unidos y Bolivia desde la asunción de Morales, en enero pasado.
Morales, un ex dirigente cocalero, expresó durante la campaña electoral su oposición a las campañas de erradicación de esa planta, utilizada para la fabricación de cocaína.
Aumenta la droga |
En el último reporte anual sobre la estrategia para la lucha contra el narcotráfico del Departamento de Estado, publicado a principios de este mes, la cancillería norteamericana apuntó un aumento del ocho por ciento en el cultivo de coca en Bolivia, lo que representó el cuarto aumento anual sucesivo.
Según el Departamento de Estado, la superficie de tierra cultivada con coca en Bolivia se elevó de 19.600 hectáreas en el 2000 a 26.500 hectáreas en el 2005. |
La reunión entre Morales y Rice debía servir, precisamente, para limar esas asperezas surgidas en la relación entre las autoridades de Washington y el presidente boliviano, quien -también durante la campaña- prometió convertirse en "una pesadilla" para Estados Unidos y nacionalizar las reservas gasíferas del país.
Citados por la prensa norteamericana el día en que Rice recibió el charango, funcionarios del Departamento de Estado que acompañaban a la ministro en su visita a Chile dijeron que "el regalo fue bien recibido".
Sin embargo, admitieron que debían "chequear con la oficina de Aduanas para conocer las reglas que se aplican" a la introducción de hojas de coca a Estados Unidos.
Las normas de la Drug Enforcement Administration (DEA), la agencia federal estadounidense contra las drogas, establecen que está prohibido el ingreso de hojas de coca.
La única excepción, señala la regla, aplica a las "hojas de coca o extracto de hojas de coca de las cuales la cocaína, ecgonina o sus sales fueron removidas".
No se sabe si a las hojas de coca que los artesanos utilizaron para decorar el charango que fue entregado a Rice se les extrajo previamente la cocaína o la ecgonina, sustancia química de la cual también deriva la cocaína.
Al parecer, ante la duda, los funcionarios que acompañaban a Rice prefirieron dejar el charango en algún lugar del itinerario del viaje -que llevó a la secretaria de Estado también a Indonesia y Australia- y evitar problemas con la DEA en la Aduana en Washington.