BUENOS AIRES.- El gobierno de la provincia argentina de Buenos Aires anunció hoy el despido de 119 altos mandos de la policía de ese distrito, la mayor fuerza de seguridad del país.
El gobernador bonaerense, Felipe Solá, dispuso el pase a retiro obligatorio de 72 jefes, declaró "prescindibles" a cinco y puso a otros 42 en situación de ’’disponibilidad’’, paso previo a su retirada obligatoria de la fuerza de seguridad, informaron fuentes oficiales.
Si bien ningún funcionario accedió a hacer comentarios sobre la medida, portavoces del Ejecutivo provincial dijeron que se trata de una reforma "revolucionaria y estructural" que dio prioridad a "la capacidad por encima de la antiguedad" de los efectivos.
En tanto, Solá ratificó en el cargo de superintendente de Coordinación Operativa de la fuerza al comisionado Daniel Rago, virtual jefe de la policía bonaerense, que cuenta con unos 46.000 miembros y es la más grande del país.
Según datos oficiales difundidos el año pasado, desde 1996 el número de agentes expulsados en las sucesivas purgas dadas a conocer por las autoridades de la provincia supera holgadamente los 4.500.
En la provincia de Buenos Aires se registra uno de los índices de delincuencia más altos del país y su fuerza de seguridad es conocida popularmente como la "maldita policía" a raíz de los abusos y los casos de corrupción en los que aparecen involucrados sus miembros.