ROMA.- El jefe del Gobierno italiano y candidato de la coalición de centroderecha a su reelección en los comicios del domingo y lunes, Silvio Berlusconi, admitió hoy que la campaña electoral "ha sido muy desagradable".
"Deseo con ansias que se celebren las elecciones este domingo. No ha sido una campaña electoral agradable", declaró Berlusconi en un programa radiofónico.
Berlusconi, cuya campaña fue virulenta e insultante, no ha dejado títere con cabeza tras haber desacreditado a su rival Romano Prodi, a la prensa, a los jueces, a los empresarios y por último a sus propios funcionarios, encargados de garantizar unas elecciones correctas y sin fraudes.
El jefe de Gobierno denunció anoche a la oposición de centro izquierda por preparar "embrollos electorales" y pidió la presencia de observadores de la ONU.
Para cerrar su campaña, el polémico candidato volvió a atacar a los jueces y la magistratura, a la que acusa de haberle abierto una investigación por soborno al inicio de la campaña electoral para desacreditarlo.
"Mis abogados presentarán las denuncias pertinentes contra los magistrados que utilizaron la justicia con fines propios", advirtió.
"Es una infamia utilizar esos recursos en vísperas de unas elecciones legislativas para influir en la opinión pública y querer invertir la votación", agregó el ex magnate de las comunicaciones.
Pese a la tensa situación política, el jefe del Gobierno italiano aseguró estar convencido de la victoria de su coalición frente a la de Romano Prodi.
