SAO PAULO.- Una bebé brasileña de 10 meses fue asesinada a golpes por su madre, de 16 años, quien confesó que cometió el crimen porque estaba cansada de escucharla llorar, informó la policía.
El caso ocurrió en Ibaté, cerca de la ciudad de Ribeirao Preto, una de las más importantes del estado de Sao Paulo.
Según la policía, los forenses determinaron que Natalia, de 10 meses, murió por traumatismo craneano-encefálico y que sus piernas estaban quebradas a causa de los golpes.
La madre intentó responsabilizar al padre en un primer momento cuando fue interrogada por la policía, pero a los pocos minutos se quebró y admitió: "No soportaba su llanto por las noches".
Según la prensa brasileña, los policías y carceleros del penal de mujeres donde fue internada, quedaron sorprendidos por la frialdad de la joven filicida.