TEGUCIGALPA.- Pandilleros degollaron a por lo menos dos reos y hirieron a otros cinco en una riña registrada la noche del martes en la prisión estatal de La Paz, en la región central de Honduras.
El portavoz de la Secretaría de Seguridad, Marvin López, dijo que "ya todo está bajo nuestro control", pero aclaró que las autoridades no han logrado introducirse al sitio de la pelea porque lo impiden los pandilleros o mareros.
Destacó que "ingresararemos allí en cuanto lleguen los fiscales y representantes de los organismos de derechos humanos".
Los mareros y los reos comunes están concentrados en dos puntos diferentes de la cárcel.
"El pleito lo protagonizaron los prisioneros de la Mara 18, que atacaron a los reos comunes", dijo a la AP el vocero policial, inspector Miguel Martínez.
Indicó que unos 100 policías de La Paz, a 120 kilómetros al noroeste de Tegucigalpa, y de la ciudad cercana de Comayagua, han reforzado a los siete custodios del centro penitenciario.
Las autoridades entretanto mantienen rodeado el centro penal y trasladaron a los heridos al hospital público de la localidad.
Los médicos dijeron que dos de los heridos están fuera de peligro y que evalúan la situación de los tres restantes.
"Los pandilleros usaron cuchillos fabricados por ellos de manera rústica para asesinar y herir a los otros reos, a los que atacaron también con palos y piedras", aseguró Martínez.
La riña comenzó, de acuerdo a los reportes policiales, cuando los pandilleros golpearon salvajemente a dos reos comunes por causas aún ignoradas, que a su vez repelieron el ataque.
Martínez explicó que "los reos comunes son campesinos que están presos en La Paz por cometer delitos menores en estado de ebriedad. Pero los pandilleros son agresivos y muy violentos".
Entre ambos bandos existía una antigua rivalidad por controlar más territorio dentro de la cárcel, según el portavoz policial.
En la prisión de La Paz hay 225 reos comunes y 11 pandilleros de La 18.
Hechos similares han ocurrido en los últimos cinco años en la mayoría de las 28 cárceles del territorio nacional, que alojan a más de 12.000 reos cuando su capacidad es para apenas la mitad, entre ellos 3.000 peligrosos líderes de La 18 y la Mara Salvatrucha.
Las dos organizaciones de pandilleros, que agrupan a alrededor de 40.000 miembros, siembran el terror desde 1996 en las principales ciudades de Honduras.