MÉXICO.- Un funcionario de seguridad de la embajada de Estados Unidos, con pasaporte diplomático, arrolló este domingo con su vehículo a dos policías mexicanos e intentó darse a la fuga, llevando durante varios metros colgado a uno de los agentes, informó la secretaría de Seguridad Pública de la capital mexicana.
El incidente se produjo en una céntrica calle de la Ciudad de México cuando una patrulla de la policía local que estaba cortando una calle obligó a desviarse al automóvil en el que viajaba el funcionario estadounidense y éste intentó hacer una maniobra no permitida.
"Ese señor se da la vuelta prohibida, se le indica que no se puede dar, la compañera se pone enfrente y sin ningún remordimiento le avienta la camioneta, lesionándola", explicó el compañero de la herida Francisco Aviú a la emisora de radio Formato 21.
"A mí me la avienta (la camioneta), pero me alcanzo a colgar de la canastilla y de la manija de la puerta del copiloto", continuó.
Según su versión, el estadounidense -al que no identificó- siguió conduciendo a alta velocidad, al parecer con Aviú colgado del vehículo, e intentó hacerle caer.
"Por más que le decía que se detuviera el señor seguía acelerando como a unos 100 kilómetros por hora. Me quería impactar contra un microbús y ahí, como ve que no me suelto, me quería impactar sobre las lámparas" de la calle, aseguró el agente.
Finalmente, unos 200 metros más adelante otro auto se cruzó en el camino del infractor y lo obligó a frenar. El policía salió disparado.
Pero, narró Aviú, el fugitivo volvió a intentar embestirlo y volvió a fugarse. El efectivo de seguridad y otro compañero que lo auxilió lo persiguieron en un taxi y finalmente la huida fue abortada unos metros más adelante por una patrulla.
En ese momento, el ocupante del vehículo, sin bajar de él, mostró el pasaporte diplomático y se identificó como funcionario de la legación estadounidense. De todos modos fue detenido.
Aviú aseguró a la emisora de radio que sólo sufrió unos rasguños, así como destrozos en su uniforme y en sus zapatos, que terminaron con las suelas destrozadas.