WEST PALM BEACH, Florida.— El ilusionista David Copperfield se salvó como por arte de magia de ser asaltado, luego de una actuación el domingo en West Palm Beach.
Copperfield iba hacia su autobús en compañía de dos asistentes cuando cuatro adolescentes se acercaron en un automóvil negro y dos de ellos, portando armas, les exigieron que les dieran sus pertenencias.
Una de las asistentes les dio 400 dólares y la otra su bolsa con 200 euros y 100 dólares, además de su pasaporte, boletos de avión y celular. Cooperfield se negó a vaciar sus bolsillos, pero ante la insistencia de los asaltantes, se sacó los bolsillos, mostrando que estaban vacíos.
Sin embargo, el ilusionista traía su pasaporte, cartera y teléfono celular. Como si fuera un carterista que se asaltara a sí mismo, los sustrajo sin que sus asaltantes se dieran cuenta, según dijo a la edición del miércoles del diario Palm Beach Post.
Los asaltantes fueron detenidos poco después y se pudo recuperar los bienes robados.