BAGDAD.- Más de mil iraquíes fueron asesinados por razones religiosas durante el mes de abril sólo en Bagdad, anunció el Presidente iraquí, Jalal Talabani.
"He recibido un informe del Instituto Médico Legal según el cual 1.091 personas fueron asesinadas en abril, sólo en la ciudad de Bagdad", declaró el Mandatario.
"Es una conmoción para todos, estamos tristes y furiosos al conocer la magnitud de estos asesinatos, a veces acompañados de torturas crueles, que golpean cotidianamente a los iraquíes", agregó.
"Estos crímenes van en contra de la religión, la moral y la humanidad", afirmó la misma fuente.
Cada día decenas de cuerpos, generalmente de personas asesinadas a balazos, son descubiertos en Irak.
Los secuestros, seguidos de ejecuciones sumarias, se multiplicaron en el país del Golfo, en particular tras la ola de violencia confesional desatada después de un atentado contra el mausoleo chiita de la ciudad de Samarra, el 22 de febrero.
"Estas muertes no son menos peligrosas que las acciones terroristas como los atentados con auto bomba o las explosiones de artefactos", afirmó el Jefe de Estado iraquí.
Talabani instó a las fuerzas de seguridad iraquíes, a los diputados y a los partidos políticos "a que actúen rápidamente para poner fin a esta masacre que quiere crear un clima de sospecha permanente entre los hijos de Irak, y destruir la unión nacional".
"La debilidad de nuestras instituciones constituye un trampolín para los terroristas y los criminales", estimó, mientras Irak, casi cinco meses después de las elecciones legislativas de diciembre, todavía no dispone del nuevo gobierno.
El Parlamento iraquí comenzó el miércoles su segunda sesión de trabajo, en la que el Primer Ministro designado, Nuri Al Maliki, podría presentar el nuevo Ejecutivo del país.
Al Maliki, designado Primer Ministro el 22 de abril, dispone de un plazo de un mes para formar su gobierno, pero el martes indicó que el Ejecutivo estaría listo "hoy o mañana".
16 muertos en emboscada
Mientras los líderes aseguran que el Gabinete estará listo en breve, la violencia sigue sacudiendo el país.
Dieciséis personas murieron el miércoles en Irak, entre ellas 12 obreros que trabajaban para la compañía iraquí de electricidad y que fueron víctimas de una emboscada en Baaquba, al norte de la capital.
"Un grupo de hombres armados abrió fuego contra el autobús que transporta a los obreros de la compañía iraquí de electricidad, a 10 kilómetros al norte de Baaquba; cuando la policía llegó al lugar, el vehículo explotó", señaló una fuente de la policía de esa ciudad a 60 kilómetros al norte de Bagdad.