VIENA.- Los Presidentes de Bolivia, Evo Morales, y de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, se reunieron hoy en Viena tras días de declaraciones que pusieron en crisis la relación de ambos países en torno a la nacionalización de los hidrocarburos bolivianos.
"Somos vecinos y aliados. Somos grandes vecinos", declaró Morales tras la reunión realizada en un hotel en Viena, a donde asistieron esta semana a la cumbre Unión Europea, América Latina y el Caribe.
"Nadie logrará enfrentarnos", afirmó el mandatario boliviano, quien culpó por la situación a una equivocación alimentada por la prensa.
La tensión entre estos países creció cuando en el marco de la cumbre Morales dijo que la empresa brasileña Petrobras, la principal inversora en el sector hidrocarburos en Bolivia, había hecho operaciones "ilegales".
Según se informó después de la reunión, deberían comenzar las negociaciones cuanto antes para acordar un precio que pueda beneficiar tanto a Brasil como a Bolivia.
El canciller brasileño, Celso Amorim, anunció que viajará pronto a La Paz, mientras que Morales se auto invitó a Brasil: "me gustaría mucho jugar al fútbol con el Presidente brasileño", dijo.