BOGOTA.— Unas 35 personas que protestaban pacíficamente por la invasión de zancudos en una población al sur de la capital, resultaron heridas luego que la policía disolviera la manifestación por bloquear la vía Panamericana que va al sur del país.
Desde hace unos cuatro años la localidad de Sibaté, a unos 20 kilómetros al sur de Bogotá, se ha visto invadida de zancudos que han provocado enfermedades y malestar entre los lugareños.
Sibaté está ubicada muy cerca de la represa de El Muña, una fuente de la que se utilizan sus aguas para generar energía eléctrica. Las aguas se fueron contaminando desde hace muchos años por el vertimiento a la misma del río Bogotá, catalogado como uno de los más contaminados del mundo.
Para dar una idea de la magnitud del problema de los zancudos, José Miguel Escobar, habitante de Sibaté, dijo al telenoticiero Caracol que por la noche, en una sola casa, sus moradores pueden recoger un kilogramo de zancudos. "Un gramo de estos diminutos animalitos contiene 375 unidades", explicó.
Los millones de zancudos provenientes de la represa mantienen a los residentes con serios problemas de salud, razón por la cual iniciaron el viernes una marcha pacífica que fue disuelta por gases lacrimógenos lanzados por la policía.
Según el general Héctor Ruiz, sus hombres debieron proceder porque los manifestantes bloquearon por cerca de seis horas la vía Panamericana, la principal carretera del país.
En la manifestación los pobladores también se quejaron por la falta de acciones rápidas y efectivas de la Corporación Autónoma Regional de Cundinamarca (CAR) para controlar la contaminación de la fuente de agua que alberga los zancudos, los olores fétidos que afectan a la población, así como la proliferación de ratas.
