CIUDAD DEL VATICANO.- Benedicto XVI recordó hoy el atentado que hace 25 años sufrió su predecesor Juan Pablo II en la Plaza de San Pedro y subrayó que, para el fallecido Pontífice, fue la Virgen de Fátima la que "milagrosamente" salvó su vida.
Joseph Ratzinger hizo estas consideraciones antes del rezo dominical del Regina Coeli, que en este periodo litúrgico sustituye el Angelus, ante varios miles de personas congregadas en la explanada vaticana.
"El 13 de mayo de 1981, hace 25 años, el siervo de Dios Juan Pablo II sintió que era milagrosamente salvado de la muerte por la intervención de una 'mano materna', como él mismo dijo", indicó Benedicto XVI, en referencia al atentado que el turco Ali Agca perpetró contra Karol Wojtyla durante una audiencia pública.
Dos de los cuatro disparos que Agca efectuó alcanzaron a Juan Pablo II y le hirieron de gravedad pero sin causarle la muerte, lo que el Papa atribuyó a la intercesión de la Virgen de Fátima, cuya festividad se celebraba ese día, 13 de mayo.
Fátima
"Todo su pontificado estuvo marcado por lo que la Virgen había preanunciado en Fátima", aseguró Ratzinger, que aludió al mensaje que en 1917 tres niños pastores afirmaron haber recibido de la Virgen.
Según el Vaticano, el atentado contra Juan Pablo II había sido anunciado por la Virgen de Fátima a los pastores, a quienes, según la tradición católica, se apareció en 1917 y les confío los llamados "secretos de Fátima", que entre otras cosas se referían al final de la Primera Guerra Mundial, el estallido de la Segunda y el fin del comunismo.
"Un mensaje realmente profético, considerando el siglo XX ensombrecido por destrucciones inauditas, causadas por guerras y regímenes totalitarios, así como de persecuciones contra la Iglesia", recalcó Benedicto XVI.
Tras el rezo del Regina Coeli, el Pontífice hizo los tradicionales saludos en diferentes idiomas, entre ellos el español, en el que se refirió a la celebración del día de la Virgen de Fátima y pidió: "Que la oración y la participación frecuente en la Eucaristía nos ayude a estar cada vez más unidos a Cristo".