CALIFORNIA.- El gobernador Arnold Schwarzenegger no tomará una decisión sobre el envío de miembros de la Guardia Nacional a la frontera entre México y Estados Unidos, sino hasta que tenga más información, dijo el miércoles su oficina.
Schwarzenegger mostró sus preocupaciones el miércoles por la tarde en una llamada telefónica al secretario de Seguridad Interna, Michael Chertoff.
"Después de la conversación de 40 minutos, estuvo claro que el gobierno no tenía respuestas", dijo la portavoz del gobernador Margita Thompson, según recoge AP.
El Presidente George W. Bush está pidiendo a los gobernadores que acaten voluntariamente su plan de despliegue de agentes de la Guardia Nacional. Pero si un gobernador rehusara la orden, el Presidente podría asumir el control federal de unidades de la Guardia y enviarlas él mismo a la frontera.
El martes, Schwarzenegger divulgó una carta que envió a Chertoff en la que preguntaba cómo el gobierno de Bush planeaba usar la Guardia. El también preguntó qué era lo que el gobierno federal consideraba un despliegue exitoso en la frontera y cuándo terminaría.
Schwarzenegger agregó que poner unidades de la Guardia en la frontera, para rotarlas cada dos o tres semanas, sería "una pesadilla logística" y sería pedir demasiado a soldados que recientemente regresaron de Irak y Afganistán.
Para ser gobernador republicano, es raro que Schwarzenegger haya sido tan explícito en sus críticas a los planes de Bush. Schwarzenegger puntualizó que apoya la meta de Bush de reducir la inmigración ilegal, pero no cree que usar a la Guardia sea lo correcto para lograr esto.