WASHINGTON.- El presidente estadounidense, George W. Bush, se negó este jueves a fijar un calendario para la retirada de las tropas de su país de Irak, al asegurar que dejará en el terreno "el nivel de fuerza necesario para ganar", en una rueda de prensa con el primer ministro británico, Tony Blair.
"Vamos a dejar allá el nivel de fuerza necesario para ganar", afirmó el presidente estadounidense, al ser consultado sobre la posibilidad de retirar las tropas de Irak después de la investidura el pasado sábado del gobierno iraquí de Nuri Al Maliki.
"Es importante que los estadounidenses sepan que la política no va a originar la decisión sobre el tamaño de nuestro nivel de fuerza", dijo Bush, a pesar de la creciente impopularidad de la guerra tanto en Estados Unidos como en Gran Bretaña.
Por su parte, el primer ministro británico insistió en que es "deber de la comunidad internacional" el apoyar al nuevo Gobierno iraquí encabezado por el primer ministro Nuri al Maliki.
La reunión entre los dos mandatarios, que continuará mañana después de que Blair pronuncie un discurso en la Universidad de Georgetown, se produce después de que el primer ministro británico se desplazara el pasado lunes a Irak para reunirse con Al Maliki.
El nuevo primer ministro iraquí, agregaron, tiene prevista una "agenda drástica" que incluye la reconciliación nacional, la lucha contra el terrorismo y la seguridad para los ciudadanos.
Ambos mandatarios instaron a dejar atrás las diferencias sobre la conveniencia o no de haber invadido Irak y haber derrocado al ex presidente Sadam Husein y pidieron, en cambio, "fortalecer esta joven democracia".
El mayor error: Abu Ghraib
George W. Bush confesó este jueves que el escándalo de tortura a prisioneros iraquíes en la cárcel de Abu Ghraib ha sido "el mayor error" de Estados Unidos en el país árabe.
"El mayor error que ocurrió hasta ahora, al menos para la implicación de nuestro país, ha sido Abu Ghraib. Hemos estado pagando por eso durante un largo periodo", afirmó el mandatario estadounidense en la rueda de prensa conjunta con su mayor aliado, el primer ministro británico, Tony Blair.
En abril de 2004, fotografías de presos iraquíes de Abu Ghraib desnudos y encadenados a puertas y hostigados por perros, o en cuclillas y en poses sexuales humillantes, ante guardias estadounidenses, dieron la vuelta al mundo y desataron condenas dentro y fuera de Estados Unidos.
El escándalo ya derivó en la sanción de algunos soldados, pero ningún alto responsable militar o civil de la administración de Bush fue condenado.
Irán decide si quiere quedar aislado
El mandatario estadounidense dijo que es decisión de Irán si quiere quedar aislado de la comunidad internacional a causa de su programa nuclear.
"Los iraníes dejaron la mesa (de negociaciones). Ellos tomaron la decisión, y la elección es de ellos", dijo Bush en la Casa Blanca.
Gran Bretaña, Francia y Alemania propusieron un paquete de incentivos para tratar de persuadir a Irán de suspender el enriquecimiento de uranio.
Estados Unidos y sus aliados también están presionando para una resolución del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, que podría resolver sanciones contra Teherán. China y Rusia, que junto a Estados Unidos, Francia y Gran Bretaña son los cinco miembros permanentes y con derecho a veto en el Consejo, se oponen a sanciones contra Irán.
"Si (los iraníes) quieren ver un paquete mejorado (de propuestas), tienen que suspender (el enriquecimiento de uranio), por el bien del planeta", destacó el mandatario estadounidense.
"Es increíblemente peligroso pensar en un Irán con un arma atómica", subrayó.
Los cancilleres de los miembros permanentes del Consejo de Seguridad tienen planeado reunirse la semana próxima en Europa, en lugar no definido aún, para discutir sobre la crisis con iraní.