Ollanta Humala salió a trotar esta mañana. |
LIMA.- Sus rivales afirman que su opción es un salto al vacío, pero Ollanta Humala se presenta mas bien como representante del enojo de los peruanos hacia los políticos y el gobierno actual que, pese a sus promesas, no han reducido la enorme brecha entre ricos y pobres en el país.
Humala, un militar retirado que busca una mayor intervención del Estado en la economía, convirtió la frustración en una fuerza política que le permitió ganar la primera ronda electoral el 9 de junio, pero que, según encuestas, no le alcanzaría para lograr la Presidencia en segunda vuelta.
Ahora Humala tendrá que definir el domingo con el ex mandatario socialdemócrata Alan García, favorito en los sondeos.
El postulante nacionalista salió a la luz pública en octubre del 2000, tras liderar con 50 reclutas una rebelión contra el gobierno del ex Presidente Alberto Fujimori, en medio del mayor escándalo de corrupción en la historia del país.
Luego de cuatro días de insurgencia en el sur de Perú, Humala fue apresado. Pero tras la destitución de Fujimori, el militar rebelde fue amnistiado por el Congreso y enviado a trabajar en las embajadas de Francia y Corea del Sur.
¿Simplemente otro caudillo?
Pero ¿quién es Humala?, ¿un nuevo líder izquierdista latinoamericano u otro caudillo de origen militar?
Al menos, lo que creen analistas es que ha sabido capitalizar el descontento de muchos por una economía liberal que ha dado crecimiento, pero ha incrementado la desigualdad.
"Soy nacionalista, que quiere rescatar el país de las empresas transnacionales", dijo Humala, de 43 años, en una reciente entrevista con Reuters.
"Queremos enarbolar la bandera de un Perú libre, fuera de la opresión de los diversos sectores económicos que no resuelven los problemas nacionales", agregó.
Su pensamiento
Humala, quien ha recibido el espaldarazo político del Presidente venezolano Hugo Chávez, un declarado enemigo de Estados Unidos, creció en una familia de ocho hermanos con la figura de un influyente padre marxista, un culto abogado que proclama que es descendiente de sacerdotes Incas.
Su padre, Isaac Humala, ha afirmado que obligaba a sus hijos a comentar cada día una lectura de autores peruanos como José Carlos Mariategui y José María Arguedas, de tendencia izquierdista y que planteaban la reivindicación de los indígenas, que son mayoría en el país.
"Don Isaac" dijo hace poco a Reuters que crió a sus hijos para ser líderes y cambiar el "modelo caduco imperialista".
El militar retirado ha afirmado que tiene como referente político al general peruano Juan Velasco Alvarado, quien tras un golpe de estado en 1968 estatizó todas las grandes empresas en sectores claves, como la minería y la agricultura.
Ahora Humala dice que no va a estatizar ni expropiar, pero habla de nacionalizar los recursos naturales del sector energético y de crear nuevos impuestos para las empresas que reportan altas ganancias.
"Tenemos que compartir nuestras riquezas con los más pobres y que las transnacionales no se lleven todas", proclama Humala en sus mítines de campaña, muy aplaudidos por sus seguidores.
La influencia de Chávez
Un actor principal en la campaña y que influyó en Humala ha sido el Presidente venezolano Hugo Chávez, quien lo alabó no sólo en eventos públicos en su país, sino en sus giras por algunos países de Latinoamérica.
El apoyo generó un conflicto diplomático entre Lima y Caracas, que se mantienen sin embajadores por la crisis.
Según analistas, el respaldo de Chávez, que es visto en Perú como poco democrático según las encuestas, provocó un efecto contrario para Humala, que se reflejó en una baja en las preferencias electorales de los últimos días de campaña.
Pero los críticos de Humala apuntan a su perfil autoritario. Durante la campaña, fue acusado de violaciones a los derechos humanos en 1992, cuando era jefe de una base militar en una zona donde imperó la guerrilla y el narcotráfico.
Según denuncias de familiares de las víctimas, el militar retirado presuntamente asesinó a tres sospechosos de ser guerrilleros y desapareció sus cuerpos, acusaciones que golpearon su candidatura.
Humala es padre de dos hijas y casado con Nadine Heredia, quien con sólo 29 años ejercería una importante influencia en su esposo, según afirman sus cercanos.