MADRID.- Un brasileño acusado de violar a diecinueve mujeres entre agosto de 2000 y julio de 2003 en Madrid, reconoció hoy los hechos y aceptó la pena máxima solicitada por las acusaciones, que supera los 300 años de prisión.
Durante el juicio que se celebró en la Audiencia Provincial de Madrid y que quedó visto para sentencia, Juvenilson Días da Silva dijo que estaba "completamente arrepentido" y aseguró que buscará ayuda en prisión "para mejorar como persona".
Según las conclusiones del fiscal, el hombre abordó a diecinueve mujeres entre agosto de 2000 y julio de 2003 a las que intimidó con un arma blanca y agredió sexualmente, "con intención de satisfacer su libido y pese a la negativa y oposición de sus víctimas".
Al procesado se le imputan, además de los 19 delitos de agresión sexual, ocho delitos de robo con violencia y cinco delitos de lesiones.
Adicional a los 300 años, Juvenilson Días da Silva también aceptó pagar la indemnización de alrededor de 1,5 millones de dólares solicitada por las acusaciones.