KABUL.- La coalición encabezada por Estados Unidos anunció que 44 milicianos perecieron durante la última semana por enfrentamientos en Afganistán.
En tanto, una bomba alcanzó a una caravana que transportaba al jefe de inteligencia de la capital afgana, quien resultó ileso aunque otras tres personas murieron.
Seis insurgentes más y tres policías perecieron también al sur del país, según la policía. Con ello, aumentó a 56 el número de muertes reportadas recientemente en Afganistán.
Los milicianos del Talibán han intensificado sus ataques, y tan sólo en las últimas tres semanas, más de 500 personas han fallecido por hechos violentos, lo que ha generado nuevos temores sobre el futuro del país, devastado por la guerra, cuatro años y medio después de que una invasión encabezada por Estados Unidos derrocó al régimen fundamentalista por dar refugio a Osama bin Laden.
La bomba alcanzó al convoy del jefe de espionaje de Kabul, Humayun Aini, en el distrito de Musayi, la noche del viernes, cuando el funcionario volvía a la ciudad tras sostener un encuentro al sur, dijo Amanula Ghazar, jefe policial capitalino.
El estallido destruyó un vehículo, lo que mató a un político local y a otras dos personas. Aini viajaba en otro automóvil y resultó ileso, dijo Ghazar.
La coalición emitió un comunicado en el que anunció la muerte de 14 milicianos en el distrito de Dihrawud, provincia de Uruzgán, el jueves.
Diez perecieron en un ataque de la artillería de la coalición contra un puesto de los milicianos, mientras que otros cuatro murieron más tarde, cuando las fuerzas afganas y de la coalición, apoyadas por aeronaves, sitiaron un bastión de los rebeldes, dijo la fuente.