COLOMBO.- Tres policías murieron hoy en el centro norte de Sri Lanka tras la explosión de una mina, un día después de un enfrentamiento entre los combatientes Tigres Tamil y las fuerzas armadas fieles al Gobierno, el cual causó 51 muertos.
"Contamos también con la ayuda de la población para señalar la mínima actividad sospechosa’’, dijo el jefe de la policía de Colombo, Chandra Fernando, quien destacó además que las medidas de seguridad fueron reforzadas.
La mina que causó la muerte de los agentes estalló contra una cisterna de agua de la policía en el distrito de Anuradhapura. El atentado fue atribuido al movimiento separatista de los Tigres de liberación del Eelam (patria) Tamil (LTTE).
Además, el jueves pasado otras 60 personas murieron y 87 resultaron heridas al explotar una bomba al paso de un autobús que trasladaba trabajadores hacia el norte del país.
Fue el atentado más grave desde que el gobierno y los Tigres Tamil firmaron el acuerdo de alto el fuego en febrero de 2002, y el que causó más víctimas desde la explosión de un tren en julio de 1996 cerca de Colombo.
Tras el ataque del jueves contra el autobús, la aviación bombardeó bases que causaron daños en la infraestructura de los rebeldes, en las selvas del norte de Iranamadu, zona controlada por los Tigres Tamil.
Sin embargo, el grupo negó su responsabilidad en el ataque lanzado contra el autobús.
Como respuesta a los bombardeos aéreos en el área de la capital Tamil, Trincomalee, por la madrugada, el grupo -con una flotilla compuesta por una decena de embarcaciones, atacó a la marina frente a la isla de Mannar, en la zona noroccidental de Sri Lanka.