Foto: Reuters. |
CIUDAD DE GAZA.- Soldados y tanques de Israel ingresaron al sur de Gaza y sus aviones atacaron tres puentes y una planta de energía eléctrica, dejando en la oscuridad la mayor parte de la franja costera la madrugada del miércoles, como presión a los milicianos que tienen en su poder a un soldado de 19 años.
Los tanques y los soldados empezaron a tomar posiciones en dos áreas al este del poblado de Rafa, de acuerdo con testigos y fuentes de seguridad palestinas. Los palestinos por su parte hicieron trincheras detrás de muros y bancos de arena, preparándose para una ofensiva israelí.
Las calles del sur de Gaza estaban vacías, algo poco común, a media mañana. Las fuerzas israelíes estaban a un kilómetro y medio de la población.
Hasta ahora no se ha informado sobre muertos.
Esta fue la primera ofensiva terrestre de Israel en Gaza desde que dejó el territorio el año pasado, destruyeron los 21 asentamientos judíos en la zona y llevándose a todos sus soldados.
Los ataques israelíes ocurren en medio de un fuerte proceso diplomático en el mundo árabe y las Naciones Unidas. La secretaria de Estado norteamericana Condoleezza Rice exhortó a Israel a "darle una oportunidad a la paz".
Con la finalidad de reducir las tensiones, negociadores del gobernante partido Hamas dijeron el martes que habían acordado un documento que reconoce de manera implícita la existencia de Israel. Pero los dirigentes del grupo en Siria, que tienen un gran poder de decisión sobre él, negaron que se haya llegado a un acuerdo.
Israel dijo por su parte que solamente la libertad del soldado Guilad Shalit, podría resolver la crisis.
"Queremos a nuestro soldado en casa, esa es nuestra única meta", indicó el ministro de Infraestructura Nacional, Binyamin Ben-Eliezer, ex general y ex ministro de la defensa. "La finalidad no es buscarlos, la meta es obligarlos a que manden a Guilad a su casa. Tienen que comprender que no estaremos simplemente sentados sin hacer nada".